6 de octubre de 2010

Acción de Gracias.


Un día como hoy, 6 de octubre pero de 2007, a las 12 del mediodía, celebraba la Primera Misa Solemne de Acción de Gracias en mi parroquia de Ntra. Sra. de Candelaria.

Ese día de la Primera Misa, que elegí sin ser consciente de la fecha que era, no dejó de ser significativo en cuanto a celebraciones. Se cumplían las Bodas de Oro de Consagración del Templo parroquial de mi pueblo, consagrado por S.E.R. Don Antonio Pildain y Zapiain, 50 años atrás (06/10/1957). Y por si esto fuera poco, además de ser el cumpleaños de mi abuela y de mi ahijado, era el 5º aniversario de la Canonización de San Josemaría Escrivá, (06/10/2002), fundador de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz a la cual pertenezco.

Hoy, tres años después, aparte del sonido de las llamadas de felicitación que he recibido, durante todo el día han resonado en mis oídos aquellas palabras de San Josemaría sobre la importancia de la celebración de la Santa Misa en la vida del sacerdote;


“Sacerdote de Jesucristo:
Celebra hoy la Santa Misa
como si fuera tu Primera Misa,
tu única Misa,
tu última Misa”.


Gracias Señor, por tanto don recibido y entregado...


8 comentarios:

Anónimo dijo...

Felicidades Padre. He rezado mucho por usted en este dia tan especial. Que Dios lo bendiga. Abrazo.

Anónimo dijo...

Muchas felicidades Norberto por el día de ayer. Nunca es tarde para felicitar a los amigos. Muy bonita la oración y el artículo. Un abrzo. L.

Anónimo dijo...

Los sacerdotes deben de ser conscientes siempre del don recibido y de lo que celebran cuando suben al altar. Ya no son ellos mismos, son Cristo mismo que actua a través de ellos. Me ha gustado mucho la oración de San Josemaría. Gracias y felicidades padre por el blog. J.A.L.

Anónimo dijo...

Felicidades con un poco de retraso.

Anónimo dijo...

Esos momentos significativos en la vida de las personas como son aniversarios diversos debiera ser un revulsivo para anirmanos a corregir aquello que hacemos mal o no todo lo bien que podríamos hacerlo, proponernos no caer en rutinas, y proponermos mejorar para bien de todos.

Felicidades

Juan Jesús García dijo...

Felicidades Norber... como el samaritano has sido agradecido por el don recibido. Seguro que el Señor te premiará con más fidelidad y más entendimiento (quién es fiel en lo poco...). Un abrazo fuerte.

Anónimo dijo...

d Norberto lo echamos de menos los domingos por la mañana venga pronto

un saludo

Anónimo dijo...

Felicidades Padre, que sea un sacerdote santo, alegre y deportista.
Un abrazo. JAM